Las “empresas con propósito” o del Cuarto Sector, aquellas que tienen
un potencial de cambio sistémico a nivel ambiental, social y económico, cuentan
con cada vez más figuras jurídicas y reglamentarias que las respaldan en
Iberoamérica, según una investigación realizada por la Secretaría General
Iberoamericana (SEGIB), el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo
(PNUD) y el Centro Internacional de Investigaciones para el Desarrollo (IDRC) de
Canadá.
El estudio “Las empresas con propósito y la regulación del Cuarto Sector en
Iberoamérica”, el primero que se ha llevado a cabo sobre el tema, fue presentado
el pasado jueves 8 de Julio, en Santo Domingo por la secretaria general iberoamericana, Rebeca Grynspan, quien se encontraba de visita oficial en República Dominicana; el director regional para América Latina y el Caribe de PNUD, Luis Felipe López Calva, y la vicepresidenta de Regiones, Estrategia y Política del IDRC, Julie Shouldice.
La investigación destaca la figura jurídica de las Sociedades de Beneficio e Interés
Colectivo como un instrumento innovador de América Latina, y señala que tres
países ya cuentan con legislaciones aprobadas en la materia (Colombia, Ecuador y Perú) y seis se encuentran discutiendo proyectos de ley en la actualidad, habiendo
consenso político para avanzar en el tema.
El estudio se realizó durante un año en nueve países iberoamericanos (Argentina,
Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, España, México, Perú y Uruguay), pero
también analizó otras legislaciones de vanguardia fuera de la región (Canadá,
Estados Unidos y Europa). Su objetivo es proponer a los gobiernos
iberoamericanos una serie de medidas de política pública para impulsar a las
empresas también conocidas como “B”, de economía circular o de triple impacto.
En este sentido, la investigación hace un llamado a los gobiernos de la región a
que promuevan la compra pública sostenible, dando preferencia a este tipo de
empresas, y a que concedan beneficios fiscales a aquellas compañías que generen
un impacto social y medioambiental positivo.
“Las políticas públicas son clave para transformar nuestros mercados y hacer
realidad los grandes cambios globales necesarios en materia de sostenibilidad e
inclusión social, y generar condiciones de liderazgo empresarial igualitario para las
mujeres. Es momento de lograr que la compra pública sostenible se consolide
como un enfoque principal de la contratación. Comprar de empresas lideradas por
mujeres y sostenibles puede jugar un rol catalítico para transformar nuestros
mercados”, dijo Julie Shouldice, del IDRC.
La secretaria general iberoamericana, Rebeca Grynspan, afirmó que Iberoamérica
puede convertirse en una región de vanguardia a nivel global en el impulso de
estas compañías: “Hoy vemos que el apetito inversor y la validación ciudadana son
dos elementos claves que ya están presentes en el auge de las empresas con
propósito. Es imprescindible contar con el tercer elemento de la ecuación: el apoyo
e impulso desde la política pública. Sólo así podremos hacer que estas empresas
sean la norma y no la excepción en Iberoamérica”.
Por su parte, Luis Felipe López Calva, del PNUD, se refirió al apoyo que se ofrecerá
al Cuarto Sector: “Llevamos más de un año analizando cómo podemos apoyar a las administraciones públicas en el impulso de un sector privado resiliente, justo y
sostenible. Nuestro próximo paso será trabajar en el desarrollo de hojas de ruta a
nivel nacional, poniendo a disposición de los países todo el conocimiento
generado y el capital humano de las tres instituciones”.
Las “empresas con propósito” tienen cada vez más protagonismo en Iberoamérica.
Actualmente representan más del 6% del PIB regional y emplean a 10 millones de
trabajadores.
MÁS INFORMACIÓN:
Secretaría General Iberoamericana
Max Seitz, jefe de prensa
MSeitz@segib.org
(+34) 679 921 572
Sigue la conversación en redes:
Commenti